Aita Tettauen: 11

22/10/2009 3.445 Palabras

Aita Tettauen de Benito Pérez Galdós Segunda parte - Capítulo IV Aunque era de soldados la tienda de Perico Alarcón, ofrecía dentro de sus paredes de lona refinamientos epicúreos. Dos velas podían lucir colocadas en botellas vacías; había mesa de tijera, como un catre, para comer; dos y hasta tres sillas del mismo sistema de abre y cierra. Las latas que contuvieron sardinas o carne salada de buey hacían veces de vajilla para servir diferentes manjares; las camas de dos dobleces eran muy cómodas, con grupas de cabalgaduras por almohadas y buenas mantas de abrigo. Del mástil que sustentaba todo el artificio de la tienda pendían objetos de puro lujo en campaña: estuche de afeitarse, abrigos impermeables, gorros para dormir, un saquito con castañas y nueces, la máquina de daguerrotipo, un manojo de chorizos y otras cosas de uso común en la vida. En una cesta, cariñosamente colocada entre dos camas, se guardaban botellas de Jerez y algunas de champagne, obsequio del...

This website uses its own and third-party cookies in order to obtain statistical information based on the navigation data of our visitors. If you continue browsing, the acceptance of its use will be assumed, and in case of not accepting its installation you should visit the information section, where we explain how to remove or deny them.
OK | More info